Trasladar a los orientadores laborales la necesidad de incorporar la tecnología en nuestro día a día, pues esta va a ser un pilar básico en el futuro y debemos tener una buena base que nos permita brindar nuestros conocimientos a las personas que acuden a orientación para que la perciban no como una obligación, sino como algo divertido que les va a aportar las herramientas necesarias para alcanzar su objetivo profesional.
Cambiar la forma de ver la orientación laboral y convertirla en un proceso transversal de mejora continua a lo largo de la vida, no sólo en los momentos puntuales de cambio profesional o desempleo.